Año: 1960
Director: Alfred Hitchcock
Intérpretes: Anthony Perkins, Janet Leigh, John Gavin y Vera Miles
Guión: Joseph Stefano (Novela de Robert Bloch)
Banda sonora: Bernard Hermann
Sinopsis: Marion Crane, que trabaja como empleada en una inmobiliaria, recibe el encargo de su jefe de ingresar en el banco cuarenta mil dólares. Marion está pasando por apuros económicos y, traicionando la confianza que en ella ha depositado su jefe, se escapa con el dinero. En su huida le sorprende una tormenta, y se detiene a pasar la noche en el motel que regenta Norman Bates, un joven aficionado a la taxidermia que vive con su madre.
1 comentario:
Ayer vimos una de las mayores obras maestras del séptimo arte: Psicosis. En ella, Hitchcock se muestra en todo su esplendor y se dedica, literalmente, a jugar con el espectador.
No fue el primero en utilizar el MacGuffin (centrar la trama inicial sobre algo que luego no tiene importancia) pero éste es, posiblemente, el más famoso de la historia del cine. Una vez que ha montado toda la intriga en torno al dinero robado (el policía, el cambio de coche, ...) asesina a la única protagonista de la historia tras apenas media hora de metraje, dejando el dinero a un nivel insignificante. Al ver la película en la actualidad no somos conscientes de lo que esto supone, ya que aunque no la hayamos visto conocemos parte del guión y la protagonista no nos es conocida, por lo que no nos resulta tan impactante.
Pero si en algo destaca Hitchcock es en su labor detrás de la cámara y durante toda la cinta muestra todo su potencial:
La famosa escena del asesinato en la ducha no es fruto de la casualidad. En ella utiliza gran cantidad de cortes y planos detalle que le llevaron 7 días de rodaje para grabar 45 segundos de película en los que la cámara toma 70 posiciones distintas.
Hitchcock trata de ocultarnos en todo momento el rostro de la madre de Norman, pero intentando que nosotros no seamos conscientes de este propósito. Una secuencia fundamental en la película es cuando Norman lleva a su madre al sótano, ya que es la primera vez que vemos a ambos juntos. En ella Hitchcock hace uso de un plano grúa hasta situar la cámara en el techo, pasando a un plano cenital (vista desde arriba), mientras centra toda la atención en la conversación de los personajes, aunque éstos no se muestren ante la cámara hasta que salen de la habitación. Oculta, y mucho, pero sin dar esa impresión al espectador.
Alfred Hitchcock, "El maestro del suspense", consigue mantener viva la tensión durante toda la película y aumentar la intriga en los momentos clave. Por ejemplo, cuando los personajes se acercan a la casa de Norman utiliza un plano picado (la cámara por encima del nivel de los personajes) para mostrar a éstos empequeñecidos e indefensos, mientras que utiliza un plano contrapicado para magnificar el poderío de la casa. Además, alterna estas imágenes con planos subjetivos (la cámara está en la posición del personaje, mostrando lo que ve éste) para meternos en los personajes y ver como se acercan a la casa mediante travellings, dando la impresión de que somos nosotros mismos los que avanzamos.
PD: Aprovechando el éxito de la película, Anthony Perkins continuó con la saga hasta Psicosis 4, llegando a dirigir la tercera parte. Miedo me da verlas...
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